Cada año, el 4 de septiembre, el mundo se une para celebrar el Día Mundial de la Salud Sexual, un recordatorio de que la salud sexual y reproductiva no es solo un asunto privado, sino una cuestión de salud pública mundial. Este día destaca la importancia de la concienciación, la educación y el acceso a la atención médica que permiten a todas las personas llevar una vida más saludable y plena.
La salud sexual y reproductiva en cifras
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de 400 millones de personas en todo el mundo carecen de acceso a servicios básicos de salud sexual y reproductiva. El Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) estima que casi 218 millones de mujeres en países de ingresos bajos y medios no tienen acceso a métodos anticonceptivos modernos. Esta falta de acceso a menudo da lugar a embarazos no deseados, abortos inseguros y un aumento de la mortalidad materna e infantil.
En los países desarrollados, los retos son diferentes: maternidad tardía, problemas de fertilidad y estrés relacionado con la salud reproductiva. Los estudios muestran que 1 de cada 6 parejas en todo el mundo se enfrenta a la infertilidad, y la demanda de tecnologías de reproducción asistida, como la fecundación in vitro, crece cada año.
Salud sexual y fertilidad
La salud sexual también afecta directamente a la fertilidad. Las infecciones de transmisión sexual (ITS) no tratadas, como la clamidia o la gonorrea, pueden causar infertilidad tanto en mujeres como en hombres. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU. informan de que las ITS se encuentran entre las principales causas prevenibles de infertilidad en todo el mundo. Por ello, la prevención, el diagnóstico precoz y el tratamiento son esenciales.
Salud mental y relaciones
El Día Mundial de la Salud Sexual no solo se centra en la salud física. También hace hincapié en la dimensión psicológica: la autoestima, el bienestar emocional y las relaciones íntimas seguras. Una investigación publicada en la revista Journal of Psychosomatic Research muestra que el estrés, la ansiedad y la depresión pueden reducir significativamente las tasas de fertilidad y el éxito de la reproducción asistida.
El papel de la innovación y la logística
Gracias a los avances de la medicina y a la colaboración mundial, hoy en día las personas tienen más opciones que nunca en el ámbito de la salud reproductiva. Las clínicas, los investigadores y los especialistas en logística trabajan codo con codo para que la FIV y otros tratamientos sean seguros y eficaces.